Hicimos un repaso de este sector en el tiempo con Ivars Barzdevics.
Ivars es traductor profesional y trabaja en el sector audiovisual desde 1993. Ha traducido numerosos proyectos, tanto para subtitulación como para doblaje.
Ivars tradujo los subtítulos de 17 largometrajes, 73 episodios de series de ficción, 38 documentales y material extra para DVD, 47 videos industriales y formativos, y 11 cortos para festivales de cine. Y para doblaje, otra cantidad sumamente impresionante: 140 largometrajes, 340 episodios de series de ficción, 688 episodios de series de animación, más de 400 documentales. Entre todo lo que hizo, se pueden mencionar producciones tan conocidas como «Los Simpson», «Cómo conocí a vuestra madre», «Modern Family», «Bones», «Seinfield», «Glee», «Star Trek», etc… Y, claro, también «Dragon Ball» (la serie de animación) y el largometraje «Dragon Ball Evolution».
Ivars nos cuenta que empezó a trabajar en traducción audiovisual de casualidad. En verdad, él había hecho la especialización en interpretación de conferencias, pero alguien le ofreció hacer una traducción para doblaje, y después vino otra, y otra más, y así siguió, forever.
Y acá empieza el viaje en el tiempo. Dice que en esa época lo llamaban por teléfono (fijo, claro) y le ofrecían una peli para traducir, él hacía las preguntas de rigor (duración, fecha de entrega y cuánto le pagaban) y si aceptaba el trabajo, tenía que ir al estudio de doblaje a buscar la peli en un cassette VHS. El guion se lo mandaban por fax. (¡Un gasto tremendo de rollo de fax!) Al principio dice que hacía los guiones en una máquina de escribir Olivetti, y cada vez que se equivocaba usaba Typex (Liquid Paper por estas costas). Cuando terminaba, llevaba el guion traducido y devolvía el VHS porque lo reutilizaban para grabar otras cosas. Después llegaron las épocas de los ordenadores, pero seguía recibiendo los VHS para ver en la tele, así que laburaba con una compu, una tele y un reproductor de VHS. Con el tiempo apareció el CD y ahí ya redujo los aparatitos a solo la compu. Desde hace un tiempo ya solo recibe las cosas por mail y FTP o WeTransfer.
Y claro, ahora ya no hace falta ir al estudio de doblaje, comenta Ivars, pero dice que eso le da pena. Siente que perdió la posibilidad de ver a los actores actuar y de aprender a partir de eso, porque así se dio cuenta de que tenía que ponerse en la piel del actor que iba a interpretar esos textos. Entonces, además de leer sus traducciones, él interpretaba sus textos y así lograba mejorarlos o adaptarlos. Pero bueno, como en todo, siempre hay pros y contras, y si bien siente que el contacto personal era una ventaja para su trabajo, también cree que la forma de trabajo virtual que existe ahora permite borrar las fronteras y expandir el alcance de los traductores.
Ivars trabajó con muchas series de humor, así que obviamente le preguntamos si recordaba alguna anécdota y no, no te las podemos reproducir tan bien como él, ¡escuchalo!
Ahora, no sé si sabías que hubo un trabajo que lo hizo famoso, pero famoso de pararlo por la calle ¡eh! (Ojo, también ha sido blanco de haters en las redes) Ivars tradujo nada más ni nada menos que Dragon Ball. Cuenta que hace muchos años le llegó este trabajo que le dijeron que era un «dibujito japonés sobre un niño que se pelea mucho». Le dieron el guion traducido al inglés (de dudosa procedencia), pero el audio estaba en japonés. Y ahí es donde Ivars se encontró con unos cuantos problemitas, por ejemplo, la longitud de las frases en un idioma y en otro. Incluso, nos contó sobre el famoso conflicto con el «kamehameha» que en España se conoce como «onda vital» y dice que no es su culpa. Si sos fan del japonesito peleador, te va a encantar esta parte de la entrevista.
Además, entre 2005 y 2007, Ivars fue coordinador para una empresa de subtitulación muy importante a nivel mundial. Teniendo en cuenta esa experiencia, le preguntamos qué consejos le daría a quienes quieren entrar en el rubro, y sobre todo, permanecer. Ivars dice que el sector hoy en día tiene muchísimo trabajo, pero también hay cada vez más aspirantes. También agrega que hoy el mercado está dominado por las plataformas de streaming, que tercerizan este trabajo con empresas de traducción, por lo cual la clave está en tratar de trabajar con esas empresas.
Ahora bien, una vez que estás adentro, ¿cómo te sostenés? Formando parte del grupo «A», o sea, los traductores buenos y rápidos. Ivars aconseja lo siguiente: seguir las instrucciones, reducir al máximo los fallos, respetar los plazos de entrega a rajatabla y ser muy rápido para contestar los mails cuando te ofrecen trabajo, porque del otro lado hay alguien tratando de asignarlo rápidamente.
Ivars también ha impartido cursos sobre traducción audiovisual en la Universidad de Cádiz, en la Universidad de Hispalense de Sevilla, la Universidad de Salamanca, la Universidad de Córdoba, el centro universitario CLUNY de la Universidad de París, la Universidad de País de Gales, la Escuela de Traductores de Tánger, la Universidad César Vallejo de Lima (Perú), y otras.
enpantuflas.podcast@gmail.com